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Todos los años escucho las mismas historias; del frío, del hambre, de tanta muerte, tanta crueldad, y todavía no caigo.
Que una persona sea tan loca, eso lo entiendo, pero que haya logrado hacer que tantos otros le sigan la corriente me parece mucho peor.
Cuando llega el momento de hablar de ese tipo de gente, me cuesta encontrar las palabras. Derepente todas las palabras del mundo, en cualquier idioma, parecen ser muy lindas y no alcanzan para describir tanta maldad, que no me entra en la cabeza todavía.
A mucha gente no le importa, porque no le corresponde. Mucha gente no sabe todo por completo; porque no le interesa, porque no quiere saber, o porque no lo entiende. Yo SI quiero saber, y aunque duela demasiado escuchar la verdad, yo la quiero escuchar y no porque sea la verdad (muchas veces hubiera preferido que me mientan), sino porque es necesario saber la historia para no repetirla y para aprender de ella.
Nunca soportaba las injusticias, me dan bronca y me hacen sentir frustración porque casi nunca puedo hacer nada para cambiarlas. Injusticias de cualquier tipo, en cualquier lugar del planeta, todo me jode, todo me molesta. Estoy mas sensible a un dolor que viene de otros que a mi propio dolor.
Pero cuando es una injusticia dentro de mi pueblo, de mi gente, el dolor lo compartimos todos y en todos los sentidos. Creo que es el unico dia en el año que nos une a todos. No creo que haya alguien que no se sienta identificado con los demas en un momento como este.
No llego a entender como se puede discriminar a una persona o a un grupo de personas, por el color de la piel, la religion, la cultura, el aspecto. No llego a entenderlo y sin embargo esas cosas siguen pasando en el mundo, hasta uno puede equivocar y pensar que le damos un OK a la discriminación, ya que estoy segura que la mayoria de nosotros no hace nada para que no haya una discriminación (en caso de que la hay), en la sociedad a la que pertenece, la cosa se convirtió en algo común. Pero, de discriminar a alguien hasta ser capaz de matarlo por una puta cultura o religión, hay un largo camino señores. Y de ser capaz de matar a alguien por algo asi, hasta matar a seis millones de personas por la misma cosa, parece que el camino es millones de veces mas largo, pero solo parece. Una persona que convierte un continente en campos de concentración, donde la unica industria es la muerte y los unicos calculos son como matar gran cantidad de gente en lo menos tiempo posible, es una persona que no merece estar muerta, merece vivir y pagar por todo lo que hizo, por toda la gente que sobrevivió sus caprichos y ahora vive con profundas cicatrices, con un numero marcado en el brazo para que siempre sigan recordando aquella época feliz, mientras veían el militar pegandoles un tiro a sus familias; sus padres, sus hermanos. Por todos los bebes que mandó a matar sin mover una pestaña, por todos los niños que dejó huerfanos, por el miedo constante que sentían día a día, por todas las veces que hizo Ta Te Ti para elegir a quien matar primero, por tantos traumas. Hitler, no se bien que castigo te mereces, lo que si se es que la muerte es el mejor castigo que te pudieron haber dado.
Y nosotros... la tercera generación, en poco tiempo no habrá quienes nos cuenten la historia. Hasta que eso pase tenemos que ver sufrir a nuestros abuelos, todo lo que les cuesta ir en mangas cortas porque asi se ve el numero marcado, todos los años que cuando llega el dia del holocausto se ponen callados. Seguimos escuchando a los que cuentan todos los años, y respetamos a los que no lo pueden contar, porque es una herida abierta y cada palabra puede hacerla sangrar.

Mas importante que recrodarlo es ocuparnos de que la cosa no vuelva a repetir.
En estos momentos hay gente que se esta muriendo en campos de concentración en diferentes lugares del mundo, discriminada por las mismas cosas, y me jode que no puedo hacer nada para pararlo, para terminarlo. Tambien se que el mundo no va a ir en contra de los discriminadores, no lo hizo antes, no lo va a hacer ahora. No podemos cambiar el mundo, pero al menos cada uno de nosotros puede intentar parar algunas discriminaciónes y no tapar un ojo y dejarlas pasar como mucha gente suele hacer...

Empezando ahora espero que con el correr de los años podamos cambiar algo...

Primero alcaro bien que no siempre voy a tener un título para las cosas que escribo. Me cuesta ordenar mis pensamientos y encima quieren que les ponga un título? No señor.
En realidad no tengo por que quejarme, me estoy exagerando. No tengo un problema específico, solo un par de cicatíces y cosas del pasado (ya parezco una vieja...), que creo haberlas olvidado (solo creo...) pero llegué a la conclusión de que nada es casual y de que cada cosa que nos pasa nos define como persona. Es por eso que no pienso dejar pasar hasta las cosas malas que me pasaron y me siguen pasando, pienso escribirlas, porque si hay algo mas fuerte que hechos y acciones son las palabras (al menos eso creo), y si hay algo mas fuerte que palabras son palabras escritas, porque las letras son imborrables.
Asi que escribo para seguir recordando (mentira, escribo porque no puedo olvidar) y advierto que voy a escribir las mismas cosas y voy a hablar de las mismas cosas. Escribo en el idioma que a mi me gusta, con muchos paréntesis, me expreso como quiero y se que nadie llegará a entender lo que escribo. Asi que si a alguien no le interesa seguir visitando esta página - no me puede importar menos. Escribo como método terapéutico.
Tampoco pienso dar la opción de dejar comentarios. No son bienvenidos. (Tipo te critico pero no me critiques). Prefiero imaginar que soy la unica que lee esto, aunque supongo que compartirlo no viene mal (¿O si?).
Termino este ridículo prólogo, a ver que sale de esto...